rituales de enero (here we go loop-de-loop!)

Hay un cambio notable en la luz diurna del fin al inicio del nuevo año. En comparación con los días de noviembre y diciembre, la luminosidad de los primeros días de enero es de una potencia tal que posee la virtud de renovar y pulir las viejas, conocidas realidades familiares.

Más allá del festejo institucionalizado gozamos de una renovación no sólo cronológica, gracias a la luz de estos primeros días de enero.

Cada inicio de año comienza con propios y personales rituales. Uno de ellos tiene que ver con la película The Blues Brothers (John Landis, EU, 1980), la cual fue renombrada en español como "Los hermanos caradura".

A medida que pasa el tiempo esta película va rebasando el ámbito de mero entretenimiento para convertirse en un monumento a lo mejor de la música estadounidense del siglo XX: junten en una sola película a una figura de la época de las big bands como Cab Calloway, a un blusero como John Lee Hooker, a iconos como Aretha Franklin y James Brown, más otras apariciones no menos especiales como la ex princesa Leia con todo un lanzafuegos o la ex modelo Twiggy, precursora de las musas anoréxicas, amén de una pléyade de intérpretes del jazz, soul y blues.

Landis tiene el mérito de haber revolucionado el videoclip musical con "Thriller", pero con esta película realizó, en parte, un documento y, en parte, una celebración al talento vivo (en ese momento) de verdaderas leyendas, así como de quienes estaban en vías de volverse una.

Por eso, pensando en una celebración, siento que el mejor momento para ver The Blues Brothers siempre es el primero de enero. Es un ritual personal que me llena de la energía y ánimo suficiente como para volver a empezar un nuevo ciclo.

Éste es uno de los mejores momentos de la peli (llena, por lo demás de buenos momentos: el desfile nazi, el concierto en el bar de vaqueros, autos y más autos destrozados, etc.). Aparición especial de Ray Charles y un centenar de bailarines de todas las edades y condiciones. Presten atención a la gente que se encuentra en el puente. Según testimonios de Landis, eran simples espectadores que contemplaban el rodaje de la escena, pero el entusiasmo los desbordó de modo tal que los volvió parte de esta gran secuencia.

Energía y ánimo a manos llenas para todos ustedes, que pasan por aquí. Que este nuevo ciclo, pese a lo que digan, no nos niegue de lo necesario; por el contrario, que sea propicio y todos nuestros afanes y esperanzas tengan respuesta.

2 GLOSAS:

Tania dijo...

¿Vale como ritual darse de cabezazos en la pared al ver que el año que terminó no hicimos nada de provecho?

Recibe desde ya tu dotación anual de abrazos y cariños de parte de esta loca.

bandala dijo...

TANIA: ¿Qué te parece cambiar el rito cefálico por uno de reinicio?
Gracias por enviarme puntualmente esa dotación que ya me hacía tanta falta. Tu dotación respectiva la recibirán no bien nos veamos para dártela personalmente. Cuídate mucho y no dejes de pasarte por aquí.